El viaje suicida de
Ángel Carromero
El cachorro del PP, entró en Cuba sin problema para un viaje que acabó en tragedia. Ángel Francisco Carromero
Barrios, 27 años, vice secretario de las Nuevas Generaciones del Partido Popular en
Madrid, acusado
de homicidio por conducción imprudente, tiene un amplío historial de infracciones de tráfico en España. Le retirarán el carnet de conducir.Le piden siete años.
Nadie sabía
en Cuba quien era Ángel Carromero hasta que el 22 de julio último causó la
insospechada muerte del líder disidente Oswaldo Payá Sardiñas. Los cables solo
reflejan que Carromero
ingresó en Cuba como turista, sin avisar de su intención de entablar contactos
con la oposición interna.
¿Nadie lo sabía en Cuba? Lo cierto
es que así comenzó Carromero su apacible veraneo por la isla para acabar trágicamente un
viaje de muchas incertidumbres que costó la vida de Oswaldo Payá y otro opositor,
Harold Cepera.
Nadie conocía en Cuba la presencia de Ángel Carromero. Nadie ha dicho por
qué se paseaba tranquilamente por Cuba el cachorro madridista del gobernante
Partido Popular español, aun cuando entró como un turista más al país donde todo
se controla.
Carromero aterrizó en La Habana y entró en Cuba como
si nada, en tiempos en que la negación de entrada a la isla es una constante, y
cada año les sucede a muchos cubanos, que
no consiguen traspasar las fronteras. Ángel Carromero no corrió la misma suerte
y, sin embargo, su viaje acabó en tragedia.
Aunque la entrada de dinero en efectivo a Cuba es libre, si la cantidad que porta el viajero es superior a $5, 000,00 USD o su equivalente en otras monedas, debe llenar la Declaración de Aduanas..
Alrededor del caso de Ángel Carromero se ha dicho de todo. Pero ni Payá
ha muerto asesinado, ni el gobierno de Cuba ignoraba la presencia del ardid del
PP en la isla. Eso no lo duda nadie.
Se le acusa de homicidio imprudente, y sobre su responsabilidad pesan
siete años. En un manifiesto acto sorpresa de rechazo al derecho y la justicia,
la familia de Payá no le quiere acusar.
A escasos días de su juicio, Ángel Carromero las tiene negras. Hizo un viaje con
más de 45 sanciones de tráfico en su contra. No
consiguió su objetivo en Cuba, y encima le imputan que debe impuestos en
España, aún cuando llevaba dinero a la
“oposición interna” en un viaje, supuestamente turístico. Nadie ha dicho
tampoco en las filas del PP sobre quien costeaba el viaje del vice secretario de
Nuevas Generaciones, y si al final la caridad económica popular se hizo.
La gran verdad es que este intento de Ángel Carromero –justificado o no- acaba de dejar la
muerte de dos exponentes de la oposición pacífica, sin un solo resultado a
favor. Aún así, el cachorro no tendrá un retorno muy tranquilo, porque ya en
España le espera una acumulación de notificaciones del ministerio de hacienda a su empresa Lostic Investment, sociedad dedicada a la gestión del gimnasio Vanitas Fitness, que Carromero regenta
en la madrileña calle de Jorge Juan.
Si finalmente Ángel Carromero es condenado a los siete años de cárcel que
le pide la justicia cubana, no hará más que cumplir la legalidad vigente. Nada le
exculpa de su responsabilidad en el accidente.
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